Exitosa asistencia en el Jiribilla...

Éxito de asistencia en el jiribilla. Cantidad y calidad, pues el pasado viernes 24 de febrero se notaba que los asistentes estaban muy interesados en el autor. Parece que el público quería poesía y más se era de Bertolt Brecht.

La actividad comenzaba puntual, y en la presentación se dieron unas breves notas biográficas sobre el autor, pinceladas para ubicar la vida de un luchador comunista que estuvo plagada de exilios y de persecuciones. Como se dijo durante esta presentación, "pareciera como si no lo quisieran en ningún lado.

El recital a cargo de Maribel Santana no fue muy largo, apenas veinte minutos que tuvieron, eso sí, una gran intensidad. La recitadora combinó su lectura con la invitación a los asistentes a recitar trozos, lo cual quedó bastante original y permitió la participación entusiasta de más de uno.

El texto "El Catón de guerra alemán" está de actualidad (¿alguna vez dejó de estarlo?), ya que refleja tal cual el momento que estamos pasando. Este acierto en el texto generó que se abriera posteriormente un debate profundo y conciso. Si bien es verdad que entre los asistentes costó un poco "romper el hielo", en seguida comenzaron las intervenciones sobre la actualidad del texto, sobre la figura del autor, el momento histórico que refleja el texto con la Alemania de Hitler de fondo cuando esta se expandía a Europa. La manera en que este tipo de poesía y las "técnicas del distanciamiento" desenmascaran al teatro clásico, haciendo de este arte una forma más de revolución, permitió que el teatro se adentrara en las masas populares intelectuales o no, para conocer de cerca el teatro alternativo, una forma de educar a los espectadores que se convierten en figuras activas, participando igualmente en lo que tenían delante (la obra que veían).

Volviendo al debate, este fue muy interesante, con bastantes turnos de palabras, ya que animó al personal, hasta el punto que muchos querían aportar más y más.

Con la que está cayendo, este tipo de actos culturales nos afinan el sentido crítico y la reflexión, un "tratamiento" de choque frente a la alienación cultural habitual "enfermiza" a la que desgraciadamente ya estamos acostumbrados.